
El grupo sinfónico venezolano comenzó su presentación en el teatro capitalino deleitando a los mandatarios y delegaciones de los países latinoamericanos y caribeños con la pieza Suite del Ballet la Estancia, Opus 8 del argentino Alberto Ginastera.
La audiencia aplaudió a rabiar a la orquesta, que en esta ocasión vestía la tradicional chaqueta con la bandera tricolor venezolana.
Seguidamente, los músicos, guiados por la batuta del maestro Dudamel, interpretaron el Danzón número 2 del insigne compositor mexicano Arturo Márquez.
A continuación ofrecieron la Cantata criolla, Florentino que Cantó con el Diablo, del compositor venezolano Antonio Estévez, composición en la que estuvieron acompañados por las excepcionales voces de los barítonos Idwer Alvarez y Gáspar Colon, así como también del Coro Nacional Juvenil de Venezuela.
Como parte del repertorio latinoamericano ejecutado por la sinfónica, la audiencia pudo disfrutar de la obra musical del brasileño Zequiña de Abreu, Tito Tico No Fubá.
El momento más jovial del concierto fue cuando los jóvenes intérpretes venezolanos bailaron al son del “Mambo” del reconocido músico cubano Dámaso Pérez Prado.
Luego de terminada la presentación, el presidente venezolano, Hugo Chávez, se acercó al escenario, para saludar y felicitar al maestro Dudamel y a la Orquesta quienes emocionaron, una vez más, a su público.
Como parte del cumbre fundacional de la Celac, la Sinfónica juvenil venezolana, junto al duo puertorriqueño Calle 13, ofrecerán otro concierto este sábado en la Base Aérea Francisco de Miranda de La Carlota, al este de Caracas.
Sobre esto, el vicecanciller venezolano, Temir Porras invitó a la población a participar en el evento cultural con un mensaje en el que expresó: “Entrada Libre! Hermandad! Unión! Asiste!”.Jesús Mendoza Sanchez
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